Señor Director Revista La Nación
La naturaleza al igual que la mujer son femeninas y en ellas cae la tremenda energía reproductiva de ambas: la primera doto a humanos y humanos de cientos de millones y cientos de miles de células reproductivas. Lo humano agrego la cultura y en ella la pregunta del millón, para que se quiere tener hijos? con tanto empeño !!!
Las respuestas varían en cada cultura, unos para trascender en el recuerdo de los hijos y otros para ser libres, aunque parezca mentira, Adán y Eva procrearon en el mundo libre fuera del Paraíso sin elección.
Porque la libertad? porque en el momento de tener hijos uno alcanza la adultez igualitaria con los paternos y maternos del mundo.
Se comprende en la abuelitud, que trascurro, en que con mis hijos, otros padres y madres, podemos necesitarnos pero no dependemos.
Los que esperan trascender en las memorias de sus hijos autoconvocan una crianza de evitacion culposa para evitar reproches, tipo idish mama.
Por ahi lo confirma el humor popular judeocristiano con las respuestas culturales de las madres ante la del hijo, las latinas italianas, si te vas te amasso!!!, y la idish mama, si te vas me muero!!!
El gran cambio en la vida de humanos y humanas es la aparición del hijo, y su crianza es revivir nuestro crecimiento desde el amor mutuo del amamantar que etimologa el amor-
Donald Winnicott, primero pediatra y luego psicoanalista dedica todos sus libros a las madres que pagaron para enseñarle, excelsa clínica pediátrica!!!
amamantadamete
Dr.Jorge Diaz Walker
le 5578312
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